martes, julio 26, 2011

Mamonería laboral

De verdad que aunque uno no quiera a veces hay que ser bien mamón en cuestiones de trabajo, lo digo porque hace como un mes me sucedió que una persona me llamo para que le cotizara un jalecillo bien simple, pero el wey quería que fuera a revisarlo a su empresa, cosa con la que no tengo ningún problema, es parte del servicio que me gusta ofrecer: que el cliente no se preocupe por las vueltas y tenga que andar saliendo de su oficina, pero no mamar, quería que fuera a la mera hora pico porque ya le urgía la cotización y aparte hasta el fin del mundo (bueno hasta algún rancho olvidado de Apodaca N.L.) , en fin, agarré mi rosario y mi agua bendita (para exorcizar a todos esos entes malignos llamados conductores de las horas pico) y me fui. Llegando tuve que dejar el carro bien lejotes porque resulta que no me dejaron pasar, ¿por qué? quién sabe, ya ven que los guardias de seguridad son como robotitos que nomas te dicen "es que no lo tengo en la lista joven" , "es que ¿de donde dice que viene?" , "es que el precio del dólar...". Y ya en vigilancia no sabían donde se encontraba la persona que me llamó, es más, hasta tardarón en saber quién era, total que luego de un buen rato de tenerme ahí esperando porque no sabían que hacer, o porque estaban analizándome para saber si era yo un terrorista, o sepa la madre, me mandaron a otra caseta que estaba por la parte de afuera de la empresa, osea que tuve que rodear caminando y con este bonito clima regiomontano de 40 graditos. Al llegar a la otra caseta lo pinche mismo: Quesque quien lo manda, que de donde me dijo que viene, que ese departamento no lo conozco, que la chingada.....uta ¿pos donde esta el compañerismo que tanto pregonan estas empresas? según esto tenia yo cita, pero pos quien sabe...., y lo que me temía, me mandaron a otro lado....¡No mamar! reflexioné por unos 0.01378 segundos y me dije, a ver campeón, pinche jalecito pedorro a lo mejor ni me lo dan y ni esta tan lucrativo, además tu no te mereces andar en este solazo, capaz que hasta te haces moreno y seria una deshonra para tu familia, amonos de cotorreo y manda a la ñoga estos hijos de su reverenda que no te saben valorar.....

El wey de vigilancia vio extrañado como en lugar de dirigirme hacia donde el me había dicho me estaba yo regresando a mi carro. En unos cuantos minutos estaba yo cenando bien agusto en mi casa, y después de darme un bañito refrescante desparramado viendo una película bien chidita con una sonrisa de oreja a oreja, ¡aaaaaah! lo bonito de poder mandar a tus clientes a la chingada...

1 comentario:

Àngello dijo...

asi es compadre, aunque yo siempre he dicho que no hay que despreciar ningun trabajo, pero pues no mamar!!, de plano a veces caen chambas que nomas dejan mas perdidas que ganacias, y mas cuando te pagan al mes, jajajajaja.

saludos