La campaña de Abel no tiene precio

Aquí iba una de mis super constructivas críticas a las tan bien logradas campañas que en estas épocas nos llegan, pero me quedo solo con esto:






Otra vez el viejo truco de la camisa sin corbata, la sonrisa forzada y el photoshopazo quita años. No mamar.

Pero lo que realmente resalta como en la mayoría de los casos, es la creativida gráfica. Eso de encerrar en un circulo las ultimas dos letras del nombre, para después usarlo en calcomanías y demás artículos haciendo notar que EL es el chido, no tiene precio. Estos weyes se merecen mínimo un premio HOW.

Y bueno como todos sabemos Abel, tiene ya buen rato jalando al lado de nuestro queridísimo Naty, (o rati como le dice la muchachada) en la dirección de obras urbanas. Así que eso es una señal de que si gana, Nuevo León seguirá siendo estado de progreso, y de un nivel cultural enorme, como hasta ahora lo ha sido (o nieguenselo a Lupe).

Ya, mucho pedo.

Bueno solo algo más, hablando del tema, comienzan las insufribles campañas de T.V., radio, prensa, etc. donde veremos a los candidatos darse baños de pueblo, con las mangas arremangadas y besando a las señoras que con toda la fe le suplican ora si le pongan su poste de luz en la calle porque roban mucho. Promesas al por mayor, y (espero que no) afeminados dimes y diretes entre candidatos: "ay si, yo hice esto y tu no", "ay tu te llevaste matemáticas a segunda en la prepa y yo puro 10" "ay ay a ti te violaron de niño", puuuras mamadas. Al final todos esos weyes ya tienen rato en la política y lo único que se están peleando es el sueldo de su nuevo puesto. Lo bueno es que ando sin estress porque las calles están solitas, sin tanto estudiante, por eso no solté tanto veneno.